sábado, 18 de mayo de 2013

En la brecha de la muralla

EN LA BRECHA DE LA MURALLA




He decidido hacer un blog. Miren que yo no era muy partidario de esto, pero aquí me tienen cayendo en dónde dije que no lo iba a hacer.No es que no creyera en los blogs, en los medios de comunicación, o como si no viera la actualidad de esto, sino que el tiempo, siempre el tiempo...es enemigo personal. Por lo menos mío. Soy sacerdote católico, y con mucho trabajo gracias a Dios, así que eso de un tiempo para escribir, a veces es algo utópico. Admiro, con cierta envidia a los que lo hacen. Pero hoy me he decidido y quiero mantenerme fiel. 

 Pero me pregunté: "¿es que hace falta que un sacerdote escriba en internet?"  Creo que hay muchos y mejores que uno escribiendo y haciendo mucho bien a las almas y dando gloria a Dios. Además me dije de qué iba a escribir si casi todo está dicho, si tenemos un Papa que es una maravilla de comunicador, con homilías diarias que te llegan al instante en el twitter. ¿De qué voy a escribir?

Bueno con todas esas buenas excusas, me iba a acomodar otra vez  en mis ocupaciones, ante la certeza que no tengo nada que decir, cuando leí este pasaje del profeta Ezequiel 22,30: " He buscado entre los hombres alguno que construyera un muro y se mantuviera en pie en la brecha ante mi, para proteger la tierra e impedir que yo la destruyera, y no he encontrado a nadie" Algo dentro de mí se quebró. Me di cuenta que en este mundo de la globalización de la tecnología, de las modas fluctuantes, de la moral ambigua, del pensamiento frágil y muchas veces corriente, de la falta de prioridades y de la importancia de las bagatelas, yo como sacerdote no me podía callar. Que no puede callar el sacerdote  porque todos los días a sus manos baja el Dios de la verdad, el Dios del amor, el Dios de la belleza, el Dios de la Misericordia, el Dios de la fraternidad y de la paz, y que todo eso le hace falta al mundo, aunque a veces no lo quiera, o no lo queramos oír. Así que tengo que escribir, al menos para recodar todas estas cosas que el Señor le dice al sacerdote. 

Pero ahora viene otro problema: el título del blog. Me venía mucho a la mente el texto citado de la Biblia, pero mucho, mucho. Como si Dios me dijera algo: " Date cuenta que la fe se pierde, que las almas se pierden, que el amor peligra, que el fuego que vine a traer a la tierra parece apagarse, que la muralla que construí para defender a mis hijos del mal tiene un agujero, tiene una brecha. Hay que defenderla, necesito que la defiendas, Tú eres mi sacerdote, algo tienes que hacer ".  

 Cristo fue un buen carpintero y le gusta martillar una idea, hasta que se hace parte de ti y debes responderle. Así que hoy mientras celebraba la Santa Misa le respondí: "Señor, yo no soy nada si Tú no me ayudas, así que yo voy a mantenerme en la brecha de la muralla, pero Tú me ayudas e iluminas, me aconsejas y guías, sino....." 

Ese "mantenerse en la brecha", que la Real Academia define como "estar el hombre o la mujer plantando cara, siempre dispuesto o decidido a defender un interés o a cumplir con un deber".  Aunque el texto de la Biblia alude a que, en el contexto histórico del tiempo de Ezequiel, estaba tan extendida la corrupción entre los líderes y el pueblo de Judá que Dios no pudo encontrar ni siquiera una persona que procurara conducir al pueblo al retorno a Él, la frase puede aplicarse en otros contextos de aquellos, a pesar de todo, se mantienen firmes en su tarea, aunque esta no les sea del todo agradable o satisfactoria, pero están ciertos de que ellos deben realizarla para bien de otros. 

Así que el blog se llamará " En la brecha" y hablaremos de todo un poco . De un "loco" de amor por el hombre llamado Dios, y del hombre, de la vida, de la muerte, del tiempo, de la belleza, poquito de política y mucho mucho de amor y más amor, porque como decían los grandes Beatles: " Todo lo que necesitas es amor"  y el mundo irá de mal en peor hasta que no tapemos los huecos, las brechas de nuestra alma, con amor. Porque sólo el amor dura para siempre. 

Le pido al Señor que me ayude a mantenerme en la brecha, haciendo el bien, tratando de cualquier forma de gritarle al mundo que el mal no tiene la última palabra, sino el amor. 
   




4 comentarios:

  1. Padre que maravillosa inspiración del Espíritu Santo, gracias por enseñarnos a obedecerle al Señor.
    Le ofrecemos nuestras oraciones por esta misión que hoy emprende.

    Bendiciones,
    Maca y Lucha

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  2. Que el Señor lo guie e ilumine siempre.

    Saludos y bendiciones
    Mónica

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  3. Esto se esta poniendo bueno Padre! ..gracias por habernos hecho pensar en lo necesario que es mantener a dieta nuestra carne q nos vendría bien de vez en cuando un ayuno. .y mas bien alimentar abundantemente nuestra alma que será único que presentaremos a Dios cuando nos llame. ..solo el amor será necesario.
    Amor vale como peso verdadero. DLB.

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  4. Gracias a Dios por enviárnoslo a Ud, Padre, como guía espiritual. Que el Espíritu Santo siga utilizándolo como verdadero instrumento de amor para que pueda llegar con este blog a muchas más almas. Pido mucho por usted. Bendiciones.

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